Vela Clásica Mallorca XXV edición
Como sabemos el mar alberga un mundo intangible de historias, secretos y recuerdos.

La preservación de la parte viva y material de las embarcaciones de Vela Clásica hacen que aquellos sucesos queden de alguna manera inmortalizados en su espíritu.
«La importancia de la conservación del patrimonio marítimo» es el mensaje que nos transmitía esta mañana don Manuel Nadal director de la regata, y que ese es el espíritu más allá de la competición en sí.

Sin duda esta tradicional evento esta cargado de mucha ilusión igual que como cada año, eso se refleja en las caras de los participantes que con alegría preparan la puesta a punto para una competición exitosa donde se promueven y comparten buenos valores y que empezará mañana día 15 de agosto .

¡Hay vientos apropiados! De entre 10 y 12 nudos y de suroeste. El universo conspira a favor de esta regata. Maravilloso!
Cabe mencionar que entre los 4 trofeos que se entregarán hay uno muy especial que es el de la celebración del 5º centenario de la «Travesía Magallanes Elcano» de la primera vuelta al mundo.

Agradezco al Club de Mar la organización y promoción de este importante evento, quienes han hecho extensiva la invitación para quienes quieran admirar éstas reliquias náuticas el día 16 de agosto en unas jornadas de puertas abiertas a las 17:30 horas seguidas de una conferencia «Abrazando el mundo. 500 años de la primera circunnavegación», si eres amante del mar anímate y ven.
40 barcos, 40 tripulaciones y una ilusión: la de navegar en una parte del pasado que aún se conserva y casi sin darse cuenta que en éstos momentos están viviendo la historia del futuro.
Hoy he tenido la oportunidad de estar a bordo del histórico barco Gipsy 1927 y además de observar y deleitarme con la impecable conservación, sentí curiosidad por las aventuras que se habrán vivido en él.
Porque las anécdotas, los sueños, las vivencias a bordo, aún no se han terminado, continúan.
Todo lo que ocurra será único irrepetible y extraordinario.

«Qué vida más aventurera iba a tener aquel barco que se estaba construyendo en Cádiz allá por el 1927 en los Astilleros de Echevarrieta y Larrinaga con el nombre de Marichu.
Un avanzado de su época convertido en barco espía durante la Guerra Civil con memorias de metralla. Tras su rejuvenecida apariencia, sería navegado como crucero por la familia Rubio y Vilar Rubio durante 20 años.
Fue ya en los años 80, con el auge de las regatas de barcos clásicos, cuando se convertiría en ganador de grandes premios en su clase, llegando segundo en una Copa del Rey en Mallorca.
Entre 2002 y 2006, el Gipsy pasó sus inviernos en el Astillero Navaltinoc de Cartagena, donde fue desmontado casi pieza por pieza y vuelto a construir con los mismos materiales para la conservación de sus orígenes. Esta nueva juvetud le supuso volver a ser ganador de contínuas y exitosas regatas y poder recorrer el Mediterráneo de norte a sur en sus largas singladuras.
Actualmente, y con sus más de 90 años, el Gipsy nunca ha dejado de navegar, nunca ha conocido crisis, ni decadencia.»
(Reseña histórica extraída de : https://gipsy1927.es/)
Salud y a seguir navegando!
¡Buenos vientos y a seguir navegando! ¡Feliz regata!
Laura